Sonrisas y Lágrimas

De Meteora a Kalomira

Jueves 17 de Febrero

📸 Alex Hohmann

A las siete de la mañana estamos los dos viendo el amanecer pero no os penséis que por haberlo visto, salimos prontito a pedalear, que va!! Seguimos siendo los de «con la calma».

Cafelazos van y vienen. Y con tan mala suerte que acaba de romper de todo la jarra de Hario, que llevo para hacer el café. Ahora ya, ni de coña tiene solución. Porque el primer trozo que me rompe, el segundo día del viaje, que ni siquiera os había mencionado, me daba cuartelillo para seguir usándola, ahora ya, ni de coña.

Me tengo que hacer con una, ahora sí que sí, pero no está nada fácil de encontrar, o igual, no la busqué con demasiada insistencia.

Son las once y media de la mañana cuando ya estamos listos para darle a nuestro día, y os lo cuento, para que veáis que sí, realmente nos lo tomamos con calma.
Montamos unos tenderetes para desayunar como marqueses, que flipáis.

De la que estamos llegando a la carretera aparecen caminando unas chicas, son de Milan, y estuvimos un rato con ellas compartiendo nuestro viaje, y el reto solidario.

Les ha encantado y quieren aportar 10€ al proyecto, Jo! ¡Qué guay! Subidón, así sí que mola empezar el día.

📸Alex Hohmann

Quiero hacer la donación directamente desde allí, con ellas, pero justo la página de migranodearena.org está en mantenimiento, pero nada, más tarde lo hace Alex pues le viene bien tener efectivo.

Y con la misma, fotillo, despedidas y a seguir pedaleando.

Nos vamos hacia, Ioanina  con dirección a la frontera de Albania.
Debemos bajar a Kalambaca nuevamente, y lo hacemos rollo circular, subimos por un lado y bajamos por el otro.

Y a unos cuantos kilómetros de salir de Kalambaca encontramos una fuente, donde paramos a por agua pero Alex me mira y me dice, y si lavamos algo de ropa.
¡Perfecto! Estaría de puta madre! Además hace solete, así que ni tan mal.

La ropa, claro, y nosotros? Pues ya os digo, que nosotros con más razón y además cabeza incluída.

Yo tengo que sacar un sobrecito de suavizante para deshacer las rastas sin arrancarme media cabellera, y le dejo un poco para Alex, que al final, también se atreve a meter la cabeza debajo del grifo.

Después me lo agradecerá, pues dice, que si no me llega a ver a mí meter allí la cabeza con ese agua tan fría, él no la mete ni de coña jajaja

Montamos sobre la Dragona y Guadalupe el tenderete de secar la ropa como buenamente podemos y seguimos pedaleo.

Nos esperan unos cuantos días de desnivel de la hostia, creo haber visto hasta Ioanina como unos tres mil y pico.

Había dos opciones, la larga con más desnivel, dando un vuelton o la que marca el Mapy.cz como la mejor, y además menos kilómetros, menos desnivel y la más directa. Así que ni nos lo pensamos. La cosa está clara.

Empezamos nuestro primer día de desniveles. Vamos tarde, obvio no? Ya salimos tarde, las chicas de Milán, el lavado personal y de ropa… Total que cuando llegamos al siguiente pueblo en subida, es casi de noche.

Vimos un par de ermitas para acampar, pero decidimos ir al pueblo a preguntar. Lo de intentar dormir bajo techo siempre es buena idea, lo consigamos o no, nosotros lo seguimos intentando.

Al llegar al pueblo, justo al entrar, hablamos con un matrimonio que nos pregunta de dónde somos y aprovechamos para preguntarles por un lugar para pasar la noche, pero luego es Alex el que pregunta en el bar mientras yo voy a por agua. No parece que nos dejen pasar por allí.

Yo tengo claro que me voy a una de las ermitas, pero es verdad que hay muchísima humedad y estaban bastante sombrías. Ya estamos entrando en pueblos de montaña y se nota.

Cuando ya no las teníamos todas con nosotros uno de los hombres que estaba al teléfono, se nos acerca y nos dice que le acompañemos. Nos lleva al consultorio médico, nos enseña el baño y la pedazo de estufa.

Buahh no damos crédito, si ehhh, estamos bajo cubierta, con baño, enchufes y una estufa.
Wow!! Gracias porque el frío ya lo teníamos calado en los huesos.

Así que allí, triundados. Cenita calentita, poner la ropa a secar al lado de la estufa y mañana es otro día, que por cierto, es el día de mi cumpleaños.




De Kalomira a Malakasi

Viernes 18 de Febrero

Menudo majete este Alex, nada más despertarse me canta el cumpleaños feliz.

Llevo un buen rato despierta pensando cómo darle un sentido a esa Cajita de los Sueños que tengo en mi página web.
Una aportación al viaje de Yoli con parte para Bicicletas Sin Fronteras y nuestro reto de la Bici es Bella.

A mis amigos les vacilé y les dije que el día de antes les iba a mandar un mensaje en plan, preparad el Bizum que mañana es mi cumple, pero me daba un montón de palo, así no, aunque dije que lo haría, ni de coña soy capaz de hacerlo.

Y con esa idea me levanto, y se la cuento a Alex, le parece una forma bonita, a mí también.

Hoy nos ponemos en marcha rapidito pues a las ocho debemos dejar libre el lugar para que pasen consulta, pero como luce el sol y hay una placita en el pueblo súper guay, para allá que vamos.

Cuando estoy en medio de todo mi lío del desayuno café etc, Alex me pregunta si tengo un minuto y por supuesto le digo que sí.
Me dice que le deje mi móvil con la cámara encendida y que cierre los ojos.

Jajaja, que tío, a saber la que tiene liada, o quiere liar, los tiros sabemos por donde van, obvio, es mi cumpleaños.

Y de repente empieza a sonar el cumpleaños feliz, me dice que abra los ojos y aparece el Alex con su mega plato y dos donuts encima y apoyados en la Dragona dos números, el 4 y el 6.

Como no podía ser de otra manera, me emociono un montón, estoy tan tan feliz y agradecida de estar compartiendo con él y gracias a él este momento!!

Gracias de  corazón

Alex, you are the best!  Alex you are the best!

Jooo como mola ehh, no me esperaba nada así ni de coña, además le había dicho, joder Alex me olvidé de comprar algo en el lidl para celebrar mi cumple! Y mira por donde, lo tenía todo pensado.

¿Os acordáis el día de la lluvia, aquella gasolinera abandonada donde paramos a tomarnos el té y comer algo, que salió Alex de detrás con ese número en alto, puntuando a la Yoli ?
Pues desde ese día lleva cargando con los números en sus alforjas. Es un grande!!

Emocionada acabamos de desayunar ahora con donuts incluídos y yo me pongo a acabar de matizar la cajita de los sueños. A contestar mensajes y a hacer la publicación de mis 46 años de vida jijiji

📸Alex Hohmann

Pero debemos seguir pedaleando aunque me quedaría subida en mi nube azul un ratito más! Las muestras de cariño son apabullantes.

La carretera la continuamos en subida, y en un momento dado, veo a Alex que da la vuelta, se dejó en el centro médico el ladrón en el enchufe. Insiste en que el espere pero somos un team, y al igual que me acompañó en la búsqueda de mi saca de comida, yo a vida con él.

A muerte no, a vida, vamos cambiando el discurso para vibrar aún más bonito.

Volvemos y al igual que cuando nos fuimos, está sonando la misa por un difunto por los altavoces. Nos queremos hacer invisibles para no molestar en esos momentos, pero por mucho que queramos, damos algo el cante, dos notas en tremendas bicis y con esas pintas.

Nada, que volvemos a empezar el día. Cómo veis, aunque hemos madrugado un montón, nuevamente volvemos a salir casi a medio día. ¡Menudo plan! Pero sabéis una cosa, yo prisa no tengo ninguna pues el día es de un desnivel continuo.

📸 Alex Hohmann

Llegamos al siguiente pueblo como os decía, en subida. Desfallecidos y como es lo habitual, con un hambre atroz.

Allí que nos paramos a comer, controlando nuestra comida porque hay una pandilla de gatos bastante interesante, creo que contamos 12. Ahí es ná!

Después de la subida aparece una bajada de esas de

agárrate que vienen curvas.

Por lo general molan las bajadas, pero molan más si sabes que no vas a tener que volver a remontar el desnivel descendido jejeje, ahí ya no hace tanta gracia, porque nada más terminar llega el cruce de caminos, donde atajamos por pista al siguiente pueblo, o seguimos por la carretera.

Miramos el perfil en Mapy.cz y vemos que es mucho más factible la pista, sólo espero que no esté llena de barro y que no tenga pendientes infumables.

Por cierto, se pedaleó súper bien, no doy crédito, todo subida pero muy continua, así muy agusto.

Al llegar al pueblo lo primero que vemos es una pequeña iglesia con una campito que nos está diciendo, hola soy yo vuestro acople para esta noche jejeje

Son las cinco de la tarde, y todo lo que nos espera es subida, no tiene mucho sentido seguir pedaleando y nos miramos, y nuevamente lo tenemos claro.

Nos quedamos y super convencidos de no pedir ni permiso, pues siempre que preguntamos por dormir alrededor de alguna iglesia recibimos un no por respuesta.

Además al llegar nos saludaron un par de vecinos que estaban en su granja. Y pensamos, ya tienen que saber que estamos aquí.

Así que allí que nos fuimos, a por los últimos rayos de sol, detrás de la iglesia.

Alex se acerca a la entrada, a ver si la iglesia está abierta, y vuelve en plan, está abierta, estamos triunfados, hoy dormimos dentro no??

A mí no me da muy buen rollo, pero asiento, claro! No es lo mismo montar tiendas y dormir fuera, que meterte dentro con tu esterilla y tu saco de dormir, tonta no soy jeje

Decidimos cenar prontito, así cuando anochezca nos colamos dentro y listo.

Después de cenar tocó soplar las velas.

📸 Alex Hohmann

Y después, con todo recogido vamos a ir hacia el frente y dejar allí las bicis, en plan, no nos estamos escondiendo y de repente, se oye un coche y nos quedamos ahí parados sin reaccionar, hasta que oímos que se pira.

Nada, pensamos que ha venido a cerrar la iglesia, bueno, era normal. Va Alex a mirar y vuelve en plan, tengo dos noticias, una buena y otra mala.

La buena es que no cerraron la iglesia, la mala es que cerraron la cancela de fuera. De verdad? ¿Estamos encerrados en el recinto?

Buahh si ya no me molaba mucho dormir dentro, ahora es en plan, tío, estamos encerrados en una propiedad privada, y si mañana vienen pronto y nos pillan. Buahh hay que madrugar si nos ven que sea fuera. ¿A qué hora vendrán?

No sabéis la de pelis que alimentadas por los dos, nos pudimos montar, de hecho ninguno de los dos durmió bien, yo ardores, Alex taquicardias.

Al final dormimos dentro y como dos gilis hablando súper bajito, como si alguien nos pudiese escuchar y estamos a tomar por culo del pueblo. No sabéis hasta qué punto nos metimos en el papel de estar haciendo las cosas fatal de mal jajaja Un cuadro.

📸 Alex Hohmann

Luego el mal rollo en sí de la iglesia, a oscuras con la iluminación tenue y trémula de cinco velas, rodeados de frescos de un motón de santos y en el techo un fresco de jesucristo mirándonos fijamente, menudo yuyu jajaja

Un final de peli para mi 46 cumpleaños.

No llamé ni a mi madre con toda la paranoia, le mandé un mensaje en plan, te llamo mañana, y ya te contaré.




De Malakasi a Katara Pass

Sábado 19 de Febrero


A las seis de la mañana los dos estábamos despiertos hacía un rato pues oímos un coche y con toda la paranoia que aún tenemos encima, cualquiera se vuelve a dormir.

Decidimos levantarnos ya, recogerlo todo y salir de la iglesia, por lo menos estar en el exterior si vienen a abrir la puerta de fuera.

Con todo en las bicis, Alex me dice, voy a ver si se puede abrir la puerta, pues al ser de dos hojas, quizá podamos salir, luego la cierro nuevamente por dentro y salgo saltando la valla.

Vuelve y dice, ya está la he abierto.
Salimos con las bicis y cuando me fijé como estaba cerrada la puerta, lo estaba con el típico pestillo, que nadie la cerró con llave.

Joder somos la puta hostia, menuda película, ni Netflix.

Igual fue alguien a poner una vela, a rezar un rosario, y al salir, cerró la puerta sin más.

Lo que hacen nuestras cabezas cuando sabes que igual no estás haciendo las cosas como deberías. Y vale que pensamos que es la casa del señor y que allí cabemos todos.

Creo que hemos aprendido la lección, sobre todo la de ojito con las películas que nosotros solitos nos podemos montar, y la otra, oye, preguntaremos no? Y si no nos dejan, pues seguimos marcha.
Pero debemos descansar tranquilos.

Ahora los dos llevamos falta de sueño, que la compensaremos con bien de cafeína. Otra cosa no tendremos , pero café y del bueno, para rato.

Así bien de tempranito, acabamos en la otra iglesia del pueblo, la grande, donde está Dios, no su hijo. Y allí, a desayunar como nos merecemos. Y animarnos, que el camino de hoy nos lleva bien alto.

Los vecinos que van pasando con los coches y nos ven, tocan el claxon y nos saludan efusivamente. Al igual que una señora que nos encontramos en lo alto del pueblo después de ya empujar a la Dragona y a Guadalupe de buena mañana.

Nos vamos por una pista, la carretera da algo de vuelta y como la de ayer la hicimos tan guay, estamos animados. Más adelante la volvemos a pillar.

Pero esta pista, resultó no tener nada que ver con la anterior. Ojito!!

El lugar por el cual vamos es una auténtica pasada de bonito, ya sabéis que yo por el paisaje de montaña siento especial admiración. Y es verdad que no tiene desperdicio ninguno, pero para nuestro pesar encontramos tramos con nieve, a ratos es tal que tenemos que ayudarnos para acabar moviendo las bicis.

Alex empuja a la dragona y Yoli vuelve para empujar a Guadalupe.

📸 Alex Hohmann

Hay un momento en el que debemos quitar hasta las alforjas, que a mí no me soluciona mucho, porque el peso que llevo con el cajón del café, más la alforja con la brida, que no puedo quitar, hace que se clave la Dragona de delante y no haya Yoli sola que la mueva.

Pues nada, con ayuda de Alex y con la calma, vamos chino chano.
Mirando a cada rato cuando llegamos a la carretera principal, al asfalto. Y como siempre, todo llega.

Asfalto!!

La alegría dura poco pues en la siguiente curva vuelve la nieve. Hay pisadas como de máquina quitanieves, o moto de nieve. El caso es que sobre esas huellas las bicis ruedan algo mejor pero por momentos se vuelven a clavar.

Nosotros pensábamos que íbamos hasta los wes, en la pista, pues ojito con la carretera.

Por momentos aparecía tramo de asfalto, así que el siguiente marrón de nieve lo hacíamos pensando que el asfalto volvería.

📸 Alex Hohmann

Menudos motivados!!

Yo pensaba, ojo, que tenemos que subir a 1700m de altitud, si esto está así aquí. Y después otro pensamiento al ver las calvas en el asfalto…Ya pero parece que esto es cara sur, igual allí que no se ven tantos árboles, la nieve está derretida, además ya con lo que llevamos sufridos vamos a seguir no??

En el vídeo digo cara norte, pero estoy hablando de cara sur


Y por supuesto que nos decíamos

🆂🅴🅶🆄🅸🅼🅾🆂 🔥🔥

Pero ya había momentos donde empujar las bicis por la cantidad de nieve se hacía casi imposible.

A Alex se le ocurrió la brillante idea de atarnos algo al cuerpo y ayudar con el mismo a tirar de la bici, así que él cogió su hamaca para atarse a Guadalupe, y yo usé la mega bufanda de lana para atarme a la Dragona y flipais, cómo cambió el cuento.
Ahora vtoy muchísimo mejor.

Pero aún así las fuerzas flaqueaban, lo bueno era que Alex y yo nos animábamos mutuamente, nos dábamos abracitos, nos reíamos de la situación y en ningún momento hubo ni un mal gesto ni una mala cara.

Todo el rato era, hay que llegar arriba hoy. Así mañana todo es bajada.

Pero en el primer hay que llegar, decía sí, sí llegamos, pero al segundo hay que llegar, mi mente era, bueno si no llegas, no pasa nada. Montamos mi tienda, dormimos los dos en ella porque no hace falta cargarla y dejamos las bicis a una distancia marcando con los chalecos reflectantes que hay dos notas acampados en mitad de la carretera.

Porque acampar en los laterales es imposible sin una pala, hay casi medio metro de nieve en algunas partes.

Y todo porque iba viendo lo que estábamos avanzando y no era nada, nada, de nada.

Para que os hagáis una idea, un 1,3km/h.
Imaginar la desesperación de ver que no avanzas, que el sol ya se está pirando y divisas allá arriba el final pero parece que no llegas nunca.

Aquí tengo pensamientos de eres la hostia, cara sur, cara sur, pero Yoli joder! Parece mentira, en qué momento se os ocurre meteros a subir a los 1700m viendo nieve ya a los 1000m.

La decisión fue tomada en Meteora y allí cómo íbamos a saber lo que nos esperaba tres días después?

Dar la vuelta significaba volver en tres días para atrás, a Kalambaca, para coger la otra opción de carretera y pedalear otros 4 días para llegar a casi donde estamos.

¡Vaya dos!

Atrás ya sabéis que ni para coger carrerilla….

Y a ver, también nos sorprendió que no hubiese cartel de carretera cortada, que la peña del pueblo no se hubiese acercado para preguntar en qué dirección íbamos y ponernos sobre aviso. ¡ Qué vamos en bici!

Pues chavules, estas cosas pasan y a Alex a mí nos pasan, de hecho sigue pasando.

Porque cuando por fin conseguimos llegar a la cumbre, al Katara Pass, el viento que sopla es infernal.

Hay una caseta de cemento que va a ver Alex para resguardarnos allí pero al parecer está llena de mierda y decidimos seguir a ver si se divisa algo en la siguiente curva.

Se va a investigar y me quedo sujetando a la Dragona y a Guadalupe gritándole que no vaya. (Gritando por el viento, no enfadada)

Pero continúa, y vuelve diciendo que no hay nada. Tenemos que guarecernos ya, de ya!!
Y acabamos en aquella pequeña edificación descartada en un primer momento.

Llegamos a ella, luchando y además de verdad, contra el viento.

Mientras yo acabo de subir a la Dragona, Alex está limpiando el pequeño cuarto para hacerlo “habitable”. Ponemos el suelo extra de su tienda y el toldo en el suelo y el mío en la puerta para cerrarle el paso al viento.

Creerme si os digo, que después de una sopa puchero que se os va la olla, con ropa seca y dentro del saco, los hoteles de cinco estrellas están sobrevalorados.

Toda la noche el viento no nos da cuartelillo, acabo durmiendo con tapones, pero ni con ellos, a ratos el ruido se te mete en el cerebro, pero es tal el agotamiento que a nada que duermes, aunque sea ratos es la hostia.

De Katara Pass a pasado Metsovo

Domingo 20 de Febrero

Nos despertamos sonriendo como cada día, da igual que estemos en la mierda. En la mierda Yoli? Bueno, igual no tanto, pero que hemos estado en situaciones mejores seguro jejeje

Desayunamos tranquilamente, con el corazón un poco alegre porque sabemos que estamos en lo más alto y ahora todo es bajada.

Vale que hay que seguir empujando hasta que desaparezca nuestra querida nieve, pero algo ayudará que sea en bajada no?

Después de recoger y guardarlo todo en las alforjas, acompañados con el viento salimos dirección Metsovo. Venga, seguimos animándonos el uno al otro.

De agua vamos algo justos, pero estamos rodeados de nieve, así que a unas malas la derretimos y la filtramos, no hay fallo.

Ahora es increíble la cantidad de nieve acumulada, diría que a ratos pasa del metro de altura.

Nosotros seguimos por esa huellas en la carretera que aunque a veces desaparecen por los ventisqueros, son una ayuda que sin ella ya os digo yo, que hace ratos, vamos que ayer, sí o sí, volveríamos atrás los días que hiciesen falta.

Creo que lo que nos enganchó y no nos dejó dar marcha atrás fue ese, a ratos vas bien, a ratos puteado y puteadísimo, pero mira que bien se va ahora jajajaja. Por justificar un poquito más eh

A mí todo el rato me acompañó el audiolibro de Angel Martín, “Por si las voces vuelven”.

Los dos días ha ido a pincho, en mi altavoz, mientras iba sola peleando cada paso.

Si no lo conocéis os lo recomiendo encarecidamente. Pues me ha ayudado mucho para conocer cómo son las enfermedades mentales y quizá para tener alguna herramienta y poder ayudar o ayudarme, llegado el caso. Muy crack de verdad, aparte, me hizo reír muchísimo en cantidad de momentos de su narración.

Y cuando nos juntábamos Alex y yo, pues a echarnos unas risas o poner alguna de las canciones que ya formarán parte de nuestra banda sonora del viaje para toda la vida.

También nos permitimos quejarnos de lo duro que se nos está haciendo, del deseo de que llegue el asfalto, de estar hasta el chichi y hasta la polla y cantarlo a voz en grito.

Hubo muchas muchas risas pese a todo y eso chavules no tiene precio, no podría escoger un compañero mejor para tremenda vivencia.

Y es verdad que con Jose las hemos pasado canutas también pues fueron muchos años de viajes/aventuras juntos, pero con Alex es diferente.

Siento una igualdad que no sentí con Jose por ser él mi pareja y además con el rol adquirido de guía de montaña, que lo es, ojo, y de los buenos.

Pero sin querer o sin ser consciente de ello, yo quedaba como en un segundo plano, detrás de él, pero en estos momentos soy un igual junto a Alex y eso para mí es grandioso.

Gracias Alex de verdad, emocionada y con el corazón en la mano, por estar en éstas a mi misma altura, de locura, quizá. De vida.

( Y ahora estoy llorando como una magdalena después de leerle estos párrafos a Alex, emociones a flor de piel, ya me conocéis, sería raro si así no fuera )

Ayer fuimos viendo huellas, que en un principio vacilo con Alex en plan el Yeti o de osos, pero dejaros de rollos que hoy hay mazo de ellas y estamos súper convencidos que son de oso, aunque no queramos creerlo en el fondo, por miedo a ir acojonados. Nuestro método de defensa.

Es brutal la cantidad de nieve, el esfuerzo físico que nos supone movernos así. Pero para nuestra alegría, encontramos una fuente, así que por ahí una preocupación menos.

📸 Alex Hohmann

Va Alex delante, cuando de repente me grita

-Yoli asfalto!!!!

Joder menudo subidón, pero aunque quiera apurar no puedo y a lo lejos vemos un coche, eso significa que ese asfalto no es otra falsa esperanza de que ya dejamos atrás la arrastrada de bici por la nieve a 1km por hora.

Es real, se termina, viene el asfalto y la bajada!

Sí sí sí!!!!
Yuuuuujuuuuuuullll

Abrazo de esos que sientes con inmensa gratitud por TODO absolutamente TODO lo compartido.

Yo beso hasta el puto asfalto jajaja

Ahora vamos a por el goce! Bajadote. Además las vistas de Metsovo nos acompañan, y sabemos que es todo para abajo.

Cuando llegamos al cruce de carretera por el que hubiésemos llegado si en Kalambaca la decisión hubiese sido otra y allí sí, la carretera estaba cortada.

Joder!! Y en el otro lado por qué no?
En fin, que ahora ya está. Que está todo bien, los dos estamos bien, y ahora no sirve de nada, el “Y si”

Bajando pasamos por delante de una estación de esquí, me parece tan surrealista.

Ya estamos aquí, hemos bajado en 15 minutos lo que hicimos ayer en 10 horas. Impresiona, la verdad.

Y ya a un kilómetro del pueblo, aunque no tendríamos que bajar, decidimos hacerlo para comer, pues nos merecemos un pequeño homenaje y aunque Alex me quiere invitar seré yo la que lo haga por el día de mi cumple.

Cruzando Metsovo nos damos cuenta que es mazo turístico, a ver donde comemos y no nos la claven, acabamos en un kebab y oye ni tan mal.

Dos pitas para mí y dos bocatas vegetas para Alex. Vale, no los pedimos así, primero pedimos uno y a la mitad de éste, nos miramos y,
-Pedimos otro no?
-Por supuesto
The same my friend jajaja

De allí paramos a coger agua. Yo con un bajonazo de la hostia, tan pocas ganas de seguir pedaleando y menos cuesta arriba, pero sabemos que la cuesta es mínima, que nos vienen unos cuantos kilómetros de bajada y llano que iremos regalados.

Queremos avanzar porque estamos en contacto con un matrimonio con dos niños, que están en la comunidad de Warmshowers y nos dan alojamiento en el pueblo de Zitsa.

Así que os podéis imaginar las ganas que tenemos de llegar a un hogar, una ducha, descansar un par de días y a poder ser, lavar la ropa.

Sabemos que no llegaremos en el día de hoy, pero sí, queremos llegar mañana.
Así que le damos, pero en mitad de una de las subidas decidimos que el prado que vemos a nuestra derecha es perfecto para quedarnos esta noche. Por supuesto, es perfecto, ya os lo digo.

Hoy es Alex el que me hace la cena, que me deje querer, y eso hago, mientras aprovecho para hacer una videollamada con mi madre, que yo en momentos así no la llamo, porque me conoce como si me pariera, si me llega a escuchar ayer o hoy en medio del marrón sabría que algo no iba bien.

Entonces es mejor contarlo a toro pasado que se suele decir y así todos felices y sin preocupaciones extra.

Acordaros que no la llamé desde esa okupación de la iglesia, y joo estuve de cumple y todo jajaja

La cena por supuesto me sabe a gloria, me encanta que cocinen para mí jijiji.

Y lo del lugar perfecto para pasar la noche, comentar que yo monté cuesta abajo. Pero hoy todo todo todo es absolutamente perfecto.

Pasado Metsovo a Zitsa

Os dejo el enlace al vídeo que hizo Alex, la verdad es que es una auténtica pasada.

Sonrisas y Lágrimas

Lunes 21 de febrero

Menuda cuesta abajo, aparecía por la noche a los pies de la tienda de una manera exagerada y me pasé la mitad de la misma, subiéndome para arriba, tanto yo, como la esterilla jajaja

El desayuno lo hacemos cada uno en nuestra tienda, hace algo de rasca, el día está nublado y con niebla baja.

Como casi todo lo que tengo, hoy llegamos a Ioanina a nuestro querido Lidl a reponer porque tantos días por la montaña, con el desgaste energético, pues eso, la comida se acaba.

Hoy podemos decir que ponemos la marcha para delante, todo recto.

En un momento Alex para a comer algo, yo le paso y le digo que no paro a comer hasta que lleguemos al Lidl, y sobre todo porque estamos en medio de una subida y a mí mientras me de la vida no paro hasta llegar arriba, algo que pocas veces he cumplido en lo que va de viaje jejeje

Pero hoy se pedalea guay, chino chano, con la calma y pedalada tras pedalada.

El paisaje mola y si la subida la hice guay, la bajada hasta Ioanina, pues obvio, mejor todavía.

Al llegar a Ioanina para mi desesperación el Lidl está cerrado y todos los supermercados también, es festivo. No me lo puedo creer.

Paramos en el último, y ahí, mi querido Alex ha vislumbrado un poquito, un inicio de cresta de la Yoli.

Ya se lo había comentado en plan, como tenga hambre o varios días sin dormir bien, ojito que soy propensa a sacar la cresta.

Y todo porque me dice, puede haber algún super pequeño, pero creo que mejor tiramos y ya encontraremos alguno por el camino, ¿no Yoli? ¿Qué quieres hacer?

Y yo con solo pensar en dar una pedalada más sin comer, son las 14h y desde las ocho que desayuné, imaginar donde tengo el desayuno, pues me entran todos los males y le contesto con esa crestita característica

-Yo quiero comer Alex!!!

Y Alex,

-Tranquila, tranquila que comemos, come come

Pobre, Alex, aunque pensándolo bien, qué pobre ni pobre, si le está dando mucho jueguecito mi ¡quiero comer! y nos está dando muchas risas.

Es la hostia el tío porque a todo le acaba sacando una risa. Y así joder, mola mucho porque a mí me peina la cresta del tirón.

Total que allí Alex se pone a hacer una ensalada con col lombarda y zanahoria. Y yo me acabo comiendo el picoteo que me queda.

Ya nos ponemos en contacto con Ana y Kostas, los warmshowers para decirles que estamos de camino y llegaremos hoy sobre las seis, a lo que nos contestan que igual no están pero nos dejan las llaves en la puerta.
Pues que guay no??

Con el estómago lleno se pedalea de otra manera. A partir de aquí hasta Zitsa es subida, sí más subida, la cual me la tomo con súper calma. Ya llegaré, total, ya no hay más que pensar, nos llega el momento
El descanso de los guerreros jejeje

Y así es, aquí estamos ya, en casa de Ana y Kostas, bueno en su casa no, en una habitación enorme con dos baños independiente total a su casa. Triunfados y con unas ganas inmensas de meternos debajo del agua caliente.

Y aquí de momento, se queda esta aventurilla hasta la próxima vez que encuentre ese lugar confortable para dedicar con todo mi cariño el tiempo necesario para transmitiros mis vivencias, intentando haceros partícipes de ellas, tal cual las vivo.

Porque si una cosa tengo clara es que

Viajar en bici me hace muy feliz

Os abrazo muy fuerte con mucho amor y súper agradecida si alguno ha decidido acompañarme.


Yoli, la Dragona y el Elbaristo

Y como broche final os comparto el vídeo que le da nombre a la entrada y que hace que me emocione y me sienta afortunada de esta aventura.

Haced click en el enlace de abajo, deseo lo viváis como parte de este team.

Gracias Alex por crear un vídeo tan bonito

Por cierto, estamos descansando unos días y gracias a ello he podido ponerme al día con el blog. Hoy, aquí y ahora, voy a intentar ir al día y publicar más a menudo así no hago tostones y no dedico 48h de mi tiempo a sólo escribir, escribir, comer, comer y dormir, dormir

❤️